Reseña del gastrónomo
Como bien dice la descripción en Instagram, Casa Trapiche es una extensión de
Cervecería Colimita en Guadalajara, y es que esta cervecería, he de decir; de mis
preferidas, trae a Guadalajara y desde hace 8 años las delicias de la gastronomía
Colimense a nuestra ciudad. En una casa antigua de la colonia Americana ubicada en la
esquina de Juan Manuel y Ramos Millán. Montaron muy bien el restaurante, que por las
tardes es comedor y en las noches añaden su roof top para dar cabida a la vendimia
cervecera de su marca propia. A cargo de la chef Jenny, que ejecuta los platillos que el
mismo Chef Nico Mejía diseñó para Casa Trapiche, en donde encontré sabores nuevos y
presentaciones sobresalientes.
Iniciamos en una comida con mis hijos Carlo y Claudio con un desfile gastronómico familiar ideal para visitar a la nutrióloga estos días.
Empezamos con un taco de cachete $70, este no es un taco normal, en un taco grande,
en tortilla de maíz azul, con un cachete marinado por una semana en un adobo
excepcional, que cocen a baja temperatura por tiempo prolongado y acaban en parrilla,
para dejar unos quemaditos que te vas encontrando en sus cubos grandes. Lo acompañan
con una costra de queso pegada en la tortilla, piña rostizada que le da al cerdo un dulzor
que merece y rematan con cebolla asada, una maravilla.
Seguimos con una picaña con menta $255 son 150 gr. De picaña en lajas de una buena
carne de la famosa carnicería XO de Querétaro, que montan sobre un sarteneado de
papas, tomate cherry y calabacita rostizados, en un espejo de mostaza y pesto. Que
acompañan con un puré de zanahoria y por supuesto menta que da el
cerrojazo a cada bocado.
No podíamos dejar pasar la hamburguesa de res con pesto $185 son 175 de carne de
res 80/20 (80% magra, 20% grasa que es la combinación perfecta para este tipo de
confecciones, dicen…) con un pesto de pepita de calabaza, un buen queso mozarella bien
derretido, chile serrano, nabo encurtido, espinaca y cebolla morada en un pan de papa
que se pasa de suave, Deli deli.
Por último y haciendo referencia a las Hamacas del Mayor donde nacieron los tacos
olvidados, pedimos unos $90 (3 piezas) de lo más buenos, lo arman con frijol, porque así
son pues, en tortilla de maíz azul, pero aquí les añaden su toque distintivo, marlín
ahumado. Y los dejan en parrilla por largo tiempo hasta dejar crujientes por todos lados.
Los presentan cortados en mitades y bañados con un gratín de mozarella de lo más rico.
Los acompañan con sus salsitas tradicionales de tomate y otras más que tiene para
acompañar tus alimentos.
En general me pareció muy buena propuesta y su comida y servicio de primera, el lugar
es agradable y tiene platillo para todos los gustos, mar y tierra. Sus precios muy justos y al
alcance de todos.
¡Sé feliz!
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